Adiós querido Paco, hasta siempre (en memoria de Paco
Vázquez)
Este año me habías citado para presentar
el cartel de la cuadrilla del Cristo de la Expiración con más antelación que
nunca. Siempre lo solías hacer en el Falla durante el COAC, pero este año hará
un par de meses ya que me dijiste la fecha de mi cita anual contigo, de mi cita
anual con tu cuadrilla. Como una premonición me dijiste la fecha mucho antes de
vernos en el Falla, ya que al final, por desgracia no nos veremos en el Falla.
Como una premonición.
Ayer estaba en Sevilla Paco, cuando me
dieron la fatal noticia. No me lo creía, es más, aun no me lo creo. Por la
autopista camino del tanatorio, no te me ibas de la cabeza, Paco.
No teníamos una relación diaria, ni
falta que nos hacía ¿Verdad Paco? Entre calé y calé no cabe la buenaventura. Tú
sabías que me tenías cuando me necesitaras al igual que yo lo sabía de ti. Bajo
ese fuerte cuerpo había un corazón que no te cabía en el pecho. Ay ese corazón.
Y pertenecías como yo al club de los llorones, raro era el año en la
presentación del cartel de tu cuadrilla en la que no se te escapa alguna
lágrima.
Hace tiempo me dijiste que el 24 de
febrero te llevara el acto de presentación del cartel, como todos los años
hacía. Y si no hay cambios, allí estaré, atendiendo a la indicación de mi
capataz. Tú no estarás, pero para mí si estarás Paco, estarás como siempre al
lado mía y dándome al final del acto mí recuerdo del mismo por haber estado.
Adiós querido Paco, hasta siempre.
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