viernes, 19 de abril de 2013

Opinión: El final de la moda pasajera

Pasó una Semana Santa más, aunque no la hemos vivido como todos queríamos por mor de la lluvia. Pero es lo que hay, no se puede hacer otra cosa y no sirve de nada lamentarse. Vendrán semanas mayores con un tiempo espléndido. Seguro. Lo que también es seguro, es que parece que la moda pasajera que algunos pretenden imponer en nuestra Semana Santa, este año 2013 ha dado muestras de caducidad (al contrario que los yogures). El pueblo ha hablado, las cuadrillas han hablado, en definitiva Cádiz se ha pronunciado y ha dicho NO, alto y claro a todas esas modas foráneas que tan poco tienen que ver con nosotros. En algunos casos, estos animadores de pista del circo de los complejos cofrades, adivinando el final que se le avecina a la fotocopia de Semana Santa que pretendían, están modulando un poco sus discursos y ya no son tan viscerales, incluso niegan la mayor sobre debates abiertos por ellos mismos manifestando ahora que no existen dichos debates sobre tradiciones gaditanas. Y estas muestras de disconformidad de Cádiz irán a más la próxima Cuaresma de seguir viéndose y oyéndose algunos espectáculos en nuestra ciudad, que aun siendo maravillosos y dignos de admirar y oír en otros lugares, pierden toda la belleza por lo desubicados que están.
Yo, por mi parte, desde cualquier trinchera mediática a mi alcance seguiré reclutando fieles a Cádiz en nuestra particular cruzada. Aunque cada vez mi tarea de ser la voz de los sin voz en este tema, tiene menos razón de ser por suerte, ya que la mayoría silenciosa está dejando de ser muda y los gaditanos están hablando y opinando por sí mismos. Es tarea de todos ir abriendo los ojos a nuestros familiares y amigos (sobre todo a los más veteranos) sobre lo que intentan hacer con nuestra Semana Santa. El boca a boca es la mejor arma que tenemos para despertar a barrios señeros de nuestra capital para que sepan lo que pretenden hacer con su querida hermandad.
Otra cosa que quería compartir con todos vosotros. Resulta que ahora, para poder opinar de Semana Santa, según los que tiran por tierra nuestras tradiciones y desprecian nuestro léxico, no vale con hablar de Semana Santa en Cuaresma. Hay que hacerlo durante todo el año, de lo contrario esa opinión no tiene validez. Para ellos, claro, que no les interesa que se sepa la verdad de lo que pretenden. Resulta también, que si hablas durante el año de Carnaval o del Cádiz C.F., no puedes hacerlo de Semana Santa. Esto es de traca ya, señores. Pues que prediquen con el ejemplo y dejen de hablar de otras cositas de Cádiz. O que dejen de salir en agrupaciones de Carnaval los cofrades de carné, estos cofrades con pedigrí. Por cierto, ¿Quién reparte esos carnés? Y ya que hablamos de Carnaval, que se dejen también de defender tradiciones de la Semana  Santa de Cádiz en coplas cantadas en el Falla a pleno pulmón en busca de un premio y de un aplauso y luego hacen lo contrario que han defendido sobre las tablas del Falla. Que tengan las agallas necesarias para no cantar esa letra, eso sería lo coherente. Pero claro, eso es pedir demasiado. En febrero digo una cosa en abril hago la contraria.
Lo mismo, no van a tener que esperar hasta la próxima Cuaresma para que sepan de mi hablando de la Semana Santa de Cádiz. De hecho, están leyendo esta columna y no estamos ni en Cuaresma ni Semana Santa. Pues no será lo último, tengo preparada una aparición estelar que a muchos de estos cofrades infieles a Cádiz va a dejar descolocado. Para que luego digan que hasta el Domingo de Piñata nada de nada por mi parte. Por cierto cualquier ciudadano de Cádiz está legitimado para poder opinar cuando le apetezca de las cofradías gaditanas desde el momento en el que reciben subvenciones públicas (en mayor o menor cuantía) que salen del bolsillo de todos los gaditanos. En resumen, al dorso de estas modas pasajeras pone la fecha de caducidad. Sólo hay que girar un poco y ver que pone muy claro 2013, aunque quedará algún coletazo en próximos años se irá erradicando poco a poco. Paciencia. Gaditanos, Cádiz recupera su Semana Santa más tradicional. A Dios gracias. Y punto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario